


Jimmy Morales, el candidato por el Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación) fue el vencedor en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Guatemala, con el 67,44 % de los votos emitidos, confirmó este lunes el Tribunal Supremo Electoral de la nación.
“Me esforzaré con todo mi corazón y con todas mis fuerzas para no defraudarles con ese voto que me hizo presidente”, indicó Morales en unas declaraciones a la cadena televisiva Guatevisión. Esas fueron sus primeras palabras desde que empezó el escrutinio.
Sin embargo, las elecciones del domingo estuvieron marcadas por cierta apatía ciudadana, ya que ejercieron su derecho al sufragio solo el 56, 32 % de los siete millones y medios de personas habilitadas.
Con dos millones 750 847 votos, el actor y productor de audiovisuales duplicó el resultado de su contraparte Sandra Torres, de la Unidad Nacional de la Esperanza, quien apenas obtuvo un millón 328 381 puntos a su favor. Desde la pasada semana, las encuestas realizadas daban como ganador a Morales.
El programa del candidato vencedor, “Visión 20/20”, está enfocado en temas como la administración pública, programas sociales, seguridad y terminar con la corrupción en el país. Pero varios analistas señalan que es un candidato al margen del sistema político tradicional y se desconoce en la práctica los cauces que tomará su gobierno.
Para el candidato, “toda Guatemala debe entrar en un momento cívico de reconstrucción. Todos nos ven como un ejemplo, menos nosotros”.
Según el diario guatemalteco La Hora, Morales centró su mensaje en asegurarle a la población que es un candidato diferente, desligado de la clase política bajo el lema “ni corrupto, ni ladrón”, frase que se ha convertido en uno de los principales ejes de su campaña.
Jimmy Morales se dio a conocer públicamente en Guatemala como productor, actor, comunicador y comediante de televisión y cine.
El partido al cual pertenece, el FCN- Nación, surgió en el 2008 como propuesta de un grupo de exmilitares que se organizaron para enfrentar reivindicaciones de los afectados por la guerra civil guatemalteca, de ahí que muchos analistas señalen una cierta oscuridad en los orígenes de la agrupación.
Por su parte, Sandra Torres, asumió su derrota el domingo en las urnas y reconoció el triunfo de su rival: “reconocemos el triunfo de Jimmy Morales y le deseamos éxitos. Estamos orgullosos de ser un partido social demócrata, soy y seré siempre una demócrata. Guatemala tiene serios problemas, pero el pueblo hizo su elección y nosotros la respetamos”.
El país se encuentra ahora bajo el gobierno interino de Alejandro Maldonado, y la juramentación de Morales se efectuará el 14 de enero del próximo año.
FRAUDE DURANTE EL GOBIERNO DE PÉREZ MOLINA
Los resultados de las presentes elecciones se pueden leer como un voto de castigo del electorado por la profunda crisis política en que está inmersa Guatemala desde mediados de abril de este año, cuando el Ministerio Público (MP) de la nación centroamericana, con el apoyo de la Comisión Internacional contra la Impunidad (organismo de las Naciones Unidas), destapó varios escándalos, entre ellos una red de defraudación aduanera conocida como “La Línea”.
Este hecho desató masivas manifestaciones en las calles, con el reclamo de renuncia de la vicepresidenta Roxana Baldetti y luego del mandatario Otto Pérez Molina, implicados en los fraudes.
A inicios de septiembre, y pese a su pronunciamiento inicial de no abandonar el cargo, Pérez Molina renunció, tras una orden de captura emitida en su contra por parte del MP debido a su participación en “La Línea”; los cargos imputados son asociación ilícita, cohecho pasivo y defraudación aduanera.
Baldetti, arrestada en agosto y actualmente en prisión preventiva, renunció a su cargo el 8 de mayo, tres semanas después de que la primera fase de la investigación saliera a la luz pública.
Las evidencias del caso contienen más de 80 000 escuchas telefónicas y 5 000 mensajes de correo electrónico, descubiertas en el transcurso de la investigación y apuntan a las preferencias a “el uno” y “la dos” que corresponderían a la participación de Pérez Molina y de Baldetti.
Otto Pérez Molina ha sido el único presidente en la historia de Guatemala a quien se le ha retirado la inmunidad debido a su participación en escándalos de corrupción.
Esa es la realidad que enfrenta el país, sumada a las deficiencias estructurales de un país subdesarrollado que está entre los más pobres de América Latina. Sin dudas los electores esperan mucho más del nuevo mandatario y la pregunta ahora es si Morales podrá estar a la altura del nuevo papel.
Deja una respuesta