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Desde Cambiemos apuestan a una devaluación abrupta y quieren repartir los costos propios del proceso inflacionario con el gobierno saliente. Los riesgos de lo que pueda pasar a fin de año.

Por Rodrigo Lugones
Aunque fue negado explícitamente por el presidente electo Mauricio Macri durante la campaña electoral, sus equipos económicos lo reconocieron por lo bajo cada vez que pudieron. Creen necesaria una devaluación abrupta (entre el 35 y 50%) del peso lo más rápido posible. Además, es lo que solicitan parte de los grupos económicos que respaldan al macrismo.
Una vez ganada la elección, desde Cambiemos explicitaron con mayor claridad su postura en materia cambiaria. El objetivo: generar expectativas en torno a una devaluación para que el corrimiento de precios comience antes de la asunción de Macri y compartir así costos con el gobierno saliente de Cristina. “No fuimos nosotros, fueron ellos”.